viernes, 13 de septiembre de 2013

El SURGIMIENTO DEL CONFLICTO ARMADO EN GUATEMALA


Para abordarlo, debemos señalar como punto de partida la contrarrevolución. A partir de ese momento el rasgo que distingue a los gobiernos es su función contrarrevolucionaria y la utilización, como método, de la violencia política.
Torres Rivas señala que inicialmente el triunfo de la contrarrevolución fue expresión de un rencor de clase y que posteriormente en la década del 60, los métodos de aplicación de la fuerza tuvieron por finalidad la contrainsurgencia, desbordando los canales institucionales, y forjando un nuevo eje de poder político vinculado al alto mando del ejército.



LA IZQUIERDA REVOLUCIONARIA Y EL SURGIMIENTO
DEL CONFLICTO ARMADO EN GUATEMALA



Por Daniela Rosés
Facultad de Humanidades y Artes UNR

RESUMEN: La izquierda revolucionaria, luego de la Contrarrevolución de 1954, comenzó a pensar en la violencia como la vía ineludible para la transformación del país, vinculándose así estrechamente con el surgimiento del conflicto armado en Guatemala. Nos centraremos en dicho conflicto y en la posterior conformación de la organización de las Fuerzas Armadas Rebeldes (FAR) con la unión del MR -13, PGT y el Movimiento 12 de abril. En ese contexto, haremos hincapié en el tránsito de radicalización que provocó en las filas de la izquierda revolucionaria la imposibilidad de una transición pacífica a la democracia y el endurecimiento de la represión estatal que siguió al triunfo de la Revolución Cubana en el marco de la Guerra fría. Entre otros factores primordiales, cuando hablamos del terror y sus secuelas en Guatemala, debemos señalar el derrocamiento de Árbenz, el conservadurismo de la oligarquía guatemalteca y el anticomunismo bajo el clima de la Guerra Fría. Consideramos que un análisis de las condiciones sociohistóricas y de los argumentos expuestos por las fuerzas revolucionarias brindará aportes para comprender los significados y expresiones que adquiere la violencia en dichos movimientos de la izquierda revolucionaria.

Breve contexto histórico

América Latina, a lo largo de las últimas décadas, se ha visto envuelta en un ascendente espiral de violencia. Guatemala no es ajena a dicha situación sino que podemos hablar de una gran inestabilidad política, golpes de Estado, movilizaciones populares y auges guerrilleros. Entre algunos de los motivos centrales que explican dicho proceso, siguiendo a Figueroa Ibarra, podemos señalar, la cuestión social aún no resuelta y el desafío de resolver dicha cuestión para transformar a la política en un asunto de cotidianidad democrática.

Nos centraremos en uno de los aspectos vinculados en el espiral de violencia, el surgimiento del conflicto armado en Guatemala o, en otras palabras, el contexto histórico de uno de los primeros auges guerrilleros del país. Para abordarlo, debemos señalar como punto de partida la contrarrevolución. A partir de ese momento el rasgo que distingue a los gobiernos es su función contrarrevolucionaria y la utilización, como método, de la violencia política.

Torres Rivas señala que inicialmente el triunfo de la contrarrevolución fue expresión de un rencor de clase y que posteriormente en la década del 60, los métodos de aplicación de la fuerza tuvieron por finalidad la contrainsurgencia, desbordando los canales institucionales, y forjando un nuevo eje de poder político vinculado al alto mando del ejército.

Si el proceso de la Revolución de 1944 estableció una democracia liberal y representativa, y a su vez había generado, deshaciendo las contradicciones que devienen de la época colonial, esperanzas o expectativas de una vía no armada para la transformación de la sociedad guatemalteca. La contrarrevolución y el derrocamiento del gobierno de Jacobo Árbenz Guzmán, por el contrario, lograron “dejar en suspenso la resolución de la cuestión social, hicieron de la vida política del país un nudo gordiano” (Figueroa Ibarra, 1990:113) Como consecuencia a largo plazo, la política de este proceso histórico, deviene en violencia política, y en particular en terrorismo de Estado.

Con la revolución, durante el gobierno de Juan José Arévalo (1945-1951), se llevó a cabo medidas políticas y sociales orientadas hacia la modernización capitalista del país. Y en el posterior gobierno de Jacobo Árbenz Guzmán (1951-1954) tales medidas se vieron profundizadas, sobre todo con el programa de reforma agraria.

La ley de reforma agraria, no se propuso ir más allá de las tareas democrático – nacionales, no excedía los límites del capitalismo, es decir, no se dirigió en contra el propio modo de producción capitalista y las acusaciones de la época de que su régimen era comunista, carecían de fundamento, sobre todo si advertimos su objetivo: “La reforma agraria de la revolución tiene por objeto liquidar la propiedad feudal en el campo y en las relaciones de producción que la originan para desarrollar la forma de explotación y métodos capitalistas de producción en la agricultura y preparar el camino para la industrialización de Guatemala” (Preámbulo de la reforma citado en Areces, 1972: 27).

Dicha acusación, como sostiene Figueroa Ibarra, radica en concebir al comunismo como una otredad intolerable desde antes del inicio de la Guerra Fría, y luego estimulado por su ideología, dicha otredad es eslabonada con otras, sobre todo, con la otredad que había legitimado la expoliación de las masas indígenas desde el periodo colonial. Así, pudieron ser posibles, los actos más ignominiosos, porque se ejercían contra alguien que no formaba parte del “nosotros”.

Volviendo a la reforma agraria, ésta procedió a la expropiación de tierras no cultivadas pertenecientes a la empresa norteamericana United Fruit Company (UFCO), que operaba en Guatemala desde principios del siglo XX apoyándose en los grandes latifundios, y controlando la economía guatemalteca, había adquirido la exoneración de impuestos, de controles de exportación, de control de tierras, del ferrocarril y del puerto. Y estaba vinculada además, a las empresas eléctrica y a la ferroviaria con sus terminales portuarias.
















Publicado por LaQnadlSol
CT., USA.

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